El Milagro Secreto de Jorge Luis Borges
"El milagro secreto" es un cuento escrito por Jorge Luis Borges, uno de los escritores más influyentes de la literatura universal. El cuento fue publicado por primera vez en 1943 en su colección "Ficciones".
El cuento narra la historia de Jaromir Hladík, un poeta judío que se encuentra prisionero en una celda en Praga durante la Segunda Guerra Mundial. Hladík ha sido condenado a muerte y está a la espera de su ejecución.
Ante la inminente ejecución, Hladík se sumerge en una profunda reflexión sobre su vida y su poesía. A medida que pasa el tiempo, él anhela tener más tiempo para terminar su obra maestra inacabada, un poema sobre la ciudad de Praga.
En el momento en que los soldados nazis se disponen a ejecutarlo, ocurre un extraño acontecimiento: el tiempo se detiene. Hladík se da cuenta de que ha obtenido un milagro, un momento eterno para terminar su poema.
Durante lo que parece ser un año entero para Hladík, él aprovecha el tiempo para perfeccionar su poesía y explorar los detalles más profundos y hermosos de su obra. Sin embargo, a medida que avanza en su escritura, Hladík comienza a sentirse angustiado por la falta de reconocimiento y la imposibilidad de compartir su obra con el mundo.
Finalmente, el tiempo vuelve a avanzar y Hladík es ejecutado. Sin embargo, la narración da un giro sorprendente al revelar que todo lo que sucedió después del momento en que los soldados iban a dispararle fue solo un sueño. Hladík murió instantáneamente y nunca tuvo la oportunidad de escribir su poema.
Fiel al estilo borgeano, Hladik encuentra a Dios en un mapa de la India. Dicho destino geográfico no es gratuito. La India, en palabras de Barrenechea:le sirve de metáfora del universo, con su doble alusión a lo vasto y a lo caótico [...] Asi comprendemos que Hladik encuentre a Dios y a la revela- ción de "El milagro secreto en un vertiginoso mapa de la India, porque ese mapa encierra como la biblioteca total todas las formas posibles que abarca la mente de Dios y además su clave todopoderosa (29)Antes de ese encuentro, que tiene lugar en un sueño, Hladik le pide a Dios un poco más de tiempo: "Otorgame esos dias, Tú de Quien son los siglos y el tiempo" (Tomo 1, 511). Una vez que el milagro es concedido, Hladik se enfrenta la creación de su drama en la se- gunda fase de la creación, guiado por el oficio y el arte, como co- mentaba al principio de este trabajo. Lo interesante aquí es la expli- cación de las motivaciones que empujaron a este creador. Según el narrador, "No trabajó para la posteridad ni aún para Dios, de cuyas preferencias literarias poco sabia" (Tomo 1, 512). Es decir, no la ter- minó para conseguir la inmortalidad con una obra que legar a las ge- neraciones futuras, como ansiaban Unamuno o Pirandello, sino para su propia realización personal, como una catarsis con que superar la experiencia de la muerte inmediata.Finalmente, el milagro es trasladado a los lectores, quienes ve- mos subvertidas las seguridades de nuestras coordenadas espacio- temporales y aceptamos esa irrealidad que para Borges es condi- ción del arte. Propongo aquí una interpretación en la que llevo hasta sus últimas consecuencias el juego que propone el texto.

